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- Antes de pagar ningún material, pedir un presupuesto de los gastos y más tarde si se está de acuerdo aceptarlo.
- Estar en todo momento con el profesional observando como desempeña sus funciones.
- Falsificación de datos. No son difíciles de encontrar los casos de contratar a un “técnico” y que en vez de un trabajador del sector acuda una persona que se hace pasar por ese tipo de profesionales. Éstos suelen cobrar dinero por trabajos mal hechos y en la mayoría de los casos inacabados. La mayor parte de las veces los estafadores engañan a sus víctimas con la muestra de documentos falsificados de la supuesta empresa para la que trabajan, así como facturas, presupuestos, etc. que no tienen ninguna validez.
Ejemplo:
Un ejemplo de ello es el que sufrió en primera persona una mujer que se puso en contacto con nosotros a través de nuestra web. Ésta solicitó un boletín eléctrico para su vivienda y unos años más tarde al contactar con su compañía eléctrica para temas no relacionados, le exigieron el boletín que ella ya había entregado. En ese momento es cuando contacta con nosotros pidiendo ayuda para resolver la situación, ya el documento que le facilitó el electricista como señal de la realización del boletín era ilegible al ser una copia de una hoja de calco. Además no podía pedir ninguna responsabilidad a la empresa ya que esta había cerrado.
Un claro ejemplo de timo de electricistas ya que los boletines eléctricos no tienen hoja de calco ni nada por el estilo, lo que hizo este supuesto “técnico” fue estafarla.
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